Los lujos y el boato de los países petroleros del Medio Oriente no pueden estar ajeno al fútbol. El triunfo de Arabia Saudita sobre Argentina todavía retumba en el Golfo Pérsico, por eso la monarquía que controla el país ha decidido tener un gesto con el plantel los Hijos del Desierto.

Así lo entendió el príncipe heredero al trono de uno de los países más ricos del planeta. Mohamed bin Salmán ha vibrado de manera presencial con la gran actuación de su equipo nacional. Fue uno de los más eufóricos en el debut del cuadro saudita y no ha querido que esa actuación pase inadvertida.

El cuadro asiático, bajo la conducción del carismático técnico francés Hervé Renard, logró una de las grandes hazañas en la historia del fútbol, tras remontar el duelo ante la Albiceleste de Lionel Messi para vencer por 2-1.

El principal hito en la historia del cuadro árabe que bajó a uno de los principales candidatos al título, siempre con la presencia del ganador de siete trofeos del Balón de Oro.

Un logro que pasará los límites del deporte para convertirse en una de las grandes anécdotas de esta Copa del Mundo de Qatar 2022. Al margen de las sinceras felicitaciones de la familia real, el plantel tendrá un generoso incentivo tras la hazaña.

Valioso premio

El príncipe heredero del país árabe ha querido recompensar a sus jugadores con un impresionante regalo. Se trata de un Rolls-Royce del modelo Phantom, cuya valoración ronda los 500.000 euros, cerca de medio millón de dólares.

Un coche de lujo con el que Bin Salman quiere retribuir la gran actuación de sus jugadores. Sin embargo, el obsequio también tiene la misión motivarlos de cara al segundo partido que tendrán contra Polonia, este sábado a las 10:00 de la mañana de Chile.

Tras el triunfo contra Argentina, el gobierno saudita decidió decretar el día como festivo nacional para que todo el país pudiera celebrar el triunfo y gozar con la hazaña que habían hecho los jugadores del equipo de Renard.

La realeza saudí suele ser una familia muy aficionada a los deportes y en especial al fútbol. En 1994, Saeed Al Owairan marcó el único tanto en el triunfo sobre Bélgica, conquista que significó la clasificación a octavos de final como mejor tercero y que fue elegido como el mejor de esa Copa del Mundo.

Un reto que fue recibido con gran orgullo en el país y por ello fue obsequiado con una recompensa muy similar a la que ahora recibirá el plantel de Qatar 2022.

El Deportivo