Verstappen vuelve a avanzar un paso en su batalla campal contra Hamilton. Si ya el viernes tuvieron sus primeros roces en las pruebas libres, hoy sábado nuevamente las dos figuras más relucientes de la parilla pelearon por la pole. Una que finalmente quedó en manos del neerlandés. En Austin el más rápido fue Max, seguido por Hamilton y Checho Pérez.
Fue una Q3 de película. Digna de todo lo que se está jugando en la Fórmula Uno. Los Red Bull a todo acelerador, disfrutando su ventaja de ritmo y complicando los planes de Mercedes. Al principio parecía que Checo se llevaba la pole, pero en la última vuelta Verstappen mostró los dientes y consiguió el mejor tiempo de la tarde: 1 minuto 32 segundos y 910 centésimas.
La conseguida en Texas es la octava pole de la temporada para el 33 de Red Bull y la undécima de su carrera. Hamilton quedó a +0.209 del registro de Verstappen y Sergio Pérez a +0.224. Bottas por su parte había quedado cuarto, pero tras la penalización de cinco puesto por cambios en el motor, largará noveno. Es la tercera vez en cuatro carreras que el finlandés pierde puestos por modificaciones.
La parte baja no tuvo sorpresas en Austin. La Q1 dejó afuera a los de siempre. Los dos Haas, que ni en su pista pueden mantener la compostura, junto a Raikkonen, Latifi y Stroll. Pero por las sanciones que han recibido Alonso, Vettel y Russell, serán estos los que salgan de la última final el domingo. Todas estas penalizaciones producto de cambios de piezas en los motores de sus coches. En el caso del asturiano, este saldrá último tras cambiar la unidad de potencia.