La lluvia cae en Santiago, pero eso a Víctor Paulmann (14 años) no lo detiene. En su club, el Manquehue, quedó de juntarse con un amigo a "pichanguear". No puede relajarse ni perder un día de básquetbol. No cuando está a horas de viajar a Osorno junto a la preselección Sub 14 de Chile que prepara el Sudamericano (del 1 al 7 de julio, en Goiania, Brasil). Y, mucho menos, porque está a dos meses de partir rumbo a España para sumarse a la cantera del Barcelona y, así, ser el primer chileno que dará botes a la naranja con la camiseta azulgrana. Salto histórico. Un promisorio proyecto que con sus 1,97 metros llamó la atención en Europa.
Agosto será el mes en que Víctor, hijo de Manfred Paulmann y Ema Parsons, cambiará de parqué. Está todo acordado. El alero vivirá en la Masía, la casa donde los culés forjan a sus estrellas. También seguirá estudiando. Por ahora se esfuerza en cerrar octavo básico en el Colegio Alemán para así comenzar el equivalente español a primero medio en cuanto pise suelo catalán.
El sueño comenzó en el campus que hizo en Santiago el entrenador argentino Óscar "Huevo" Sánchez, a principios de año. Él vio condiciones en Víctor. Le motivó a hacer un video y mandarlo a Barcelona. El interés por el chileno fue inmediato. Cómo no, si se les presentaba un chico de 14 años bordeando los dos metros y con la certeza de que seguirá creciendo, pues el examen de muñeca que se hizo arrojó que medirá entre los 2,05 y 2,08 metros. En marzo viajó a España y después de una semana entrenando con su categoría, cerró su traspaso.
Es solo un comienzo, pero Víctor ya se lo toma con profesionalismo. En la preselección Sub 14 es quien marca el ritmo a sus compañeros. Daniel Frola, head coach de la Roja y a cargo de esta serie, reconoce las cualidades del alero. "A su altura le agrega buen manejo de balón y velocidad. Le falta fortalecerse, pero tiene un potencial muy grande. Sumado a lo fundamental para él, que el básquet es su pasión", dice el DT.
Cuando estuvo en Barcelona conoció las instalaciones del club. De reojo vio salir el auto de Arturo Vidal. "Es un ídolo, aunque juegue fútbol. Me gusta su carácter de imponerse. Sería muy loco un encuentro", se ilusiona Víctor. Sin embargo, sus referentes están en la NBA, a donde le gustaría llegar algún día. El camino recién inicia y Kevin Durant con Kawhi Leonard son los jugadores que sigue. "Me reflejo un poco en el juego de Durant. Es bastante alto, pero también súper ágil", reconoce Paulmann.
Como atacante y defensa, ágil y "con muchas ganas de seguir mejorando" se describe Víctor. Desde cuarto básico que juega básquetbol, después de años rechazándolo. "Soy un jugador con hambre de triunfos. Aunque vayamos perdiendo, hay que ir igual, siempre con la cabeza arriba". Mentalidad ganadora y bravo carácter también son sus cualidades.
Y aunque su nuevo camino lo motiva, también está la mezcla de sentimientos. Dejar a la familia y dedicarse como un profesional al deporte es un paso importante. Sendero que está dispuesto a transitar. Decisión que quiso tomar: "Es un orgullo. Una oportunidad para dejar el básquetbol chileno en un lugar alto". Ignacio Arroyo, el primer chileno que suma minutos en la Liga ACB, lo espera en España. Desde ahora en adelante, otro basquetbolista nacional hará patria en Europa.