Cientos de padres gritan. Cientos de madres corren. Euforia total. Desde las siete de la mañana, las orillas del lago Villarrica y los alrededores de la Plaza de Armas de Pucón han sido escenario de las situaciones más incómodas a las que un niño podría enfrentarse.
Un padre corriendo detrás de su hijo, con cronómetro en mano, le grita que apure su cadencia en la bicicleta, que aún está muy lento en comparación a lo planificado. El menor no supera los 11 años y mira con cara de no saber qué hacer. Realmente va lento, pero con los retos difícilmente podrá entusiasmarse y acelerar.
Lo que se vive en el Kids Challenge, la carrera que bautiza al triatlón nacional, se puede ver de dos formas: como una carrera en que los niños disfrutan, o un suplicio que cumplen por obligación. Muchos reciben retos, varios sufren los nervios que les transmiten sus progenitores; ganar, a la edad que sea, motiva más a adultos que a niños.
Para ser justos, no todo es tan malo. Ayer, como todos los años, si bien ocurrieron situaciones complejas como las descritas, también hubo padres que se lo tomaron con normalidad. Entre ellos estuvo el matrimonio de Jorge Amtahuer (46 años, agrónomo y ex campeón nacional de la disciplina, compañero de Cristián Bustos, Matías Brain y Van de Wyngard en la UC) y Ximena Varas (48, Ingeniera en alimentos y también ex triatleta UC). Clemente, su retoño, a sus tiernos nueve años asumió por primera vez el desafío de enfrentarse a un triatlón.
Cruzó la meta retrasado de los líderes y un codazo en la frente, pero no recibió retos. "Te vi algo lento en la bicicleta, hijo, es algo que tenemos que aprender", le dice Jorge, que además es su entrenador, mientras el pequeño sólo dice que esta experiencia debe repetirse todos los años.
Caso similar fue el del golfista Felipe Aguilar. Su hija, Victoria, ganó en la categoría 14-15 de forma sorpresiva. "Le dije que era muy difícil que ganara, porque era una categoría muy dura. Con eso estaba tratando de bajarle la presión, cuando son chicos se presionan mucho. Era más importante que estuviera enfocada en pasarlo bien", remata el valdiviano.