Lleva una semana en Barcelona y Arturo Vidal ya suma un título con el club azulgrana. El Barça le ganó con dificultad al Sevilla por 2-1 y se quedó con la Supercopa de España, que tuvo en cancha al seleccionado nacional para los últimos cinco minutos de la definición. Con la 22 en la espalda, el Rey intervino poco en acción pero saltó al campo con su nueva camiseta y suma una nueva estrella en su nutrido palmarés.
En el minuto 85, Vidal fue el tercer cambio de Ernesto Valverde. Ingresó por el francés Dembélé y se ubicó en la misma posición en la cual estaba el galo: volante abierto por la derecha en un dibujo de 4-4-2.
El fútbol tan globalizado y mercantil de nuestros tiempos hizo que la definición de la Supercopa española se realizara en Marruecos, específicamente en Tánger, al norte de aquel país, a partido único y con videoarbitraje como cambios notorios.
Más allá de que se tratase de la apertura oficial de la temporada del fútbol hispano, se notan los resabios de una pretemporada particular por el factor Mundial. El Barça inició con su clásico 4-3-3, pero con sorpresas, como las presencias desde el arranque del trío Arthur-Busquets-Rafinha en el mediocampo. Pese a que se tratan de buenos nombres, no fueron factor ni en defensa ni en ataque. En ese primer lapso que terminó 1-1, el juego ofensivo culé lo elaboraba principalmente Messi, apoyado por las subidas incesantes de Jordi Alba por la franja izquierda.
Pese a que el control fue azulgrana durante todo el cotejo, fue el Sevilla de Pablo Machín el que abrió la cuenta mediante un zurdazo de Pablo Sarabia (9'), jugaba para la cual se recurrió a la intervención del VAR para confirmar su buena posición. La reducción de espacios de los andaluces impedía mayor profundización del Barcelona, que empujaba y empujaba. El empate llegó en los 42', pero luego de una pelota detenida. Tiro libre de Messi que da en un poste y Piqué captura el rebote.
Si el Barça quería ganar, necesitaba hacer cambios. Y Valverde los hizo. Para el complemento entraron Rakitic y Coutinho por los opacos Rafinha y Arthur. El esfuerzo del Sevilla se notó y perdieron potencia, con lo cual los catalanes fueron más incisivos. En ese sentido, el portero Vaclik apareció para evitar un gol en contra. Cuando no pudo hacer mucho fue con un notable remate de Dembélé, quien en los 78' anotó el 2-1 para la victoria culé.
El Sevilla tuvo la gran oportunidad para estirar la definición al alargue, por un penal de Ter Stegen a Aleix Vidal, pero Ben Yedder le pegó horrible en el último minuto. Atajó el alemán.
Victoria del Barcelona, primer título de la temporada y Arturo Vidal ya tiene minutos oficiales en su nueva escuadra. Ahora, el objetivo es el Trofeo Joan Gamper, de este miércoles ante Boca Juniors, y el estreno por La Liga del próximo sábado ante el Alavés de Guillermo Maripán.
