Fue una gran temporada para Alexis Sánchez en lo personal. Pese a que el Marsella estuvo lejos de brillar en lo colectivo, el formado en Cobreloa se las arregló para volver a posicionarse como uno de los delanteros más sólidos que militan en el fútbol europeo. De hecho, fue el máximo goleador de su equipo en la Ligue 1 con 14 anotaciones. En estos momentos, después de su paso por la Selección, en donde jugó los amistosos ante República Dominicana y Bolivia, el Niño Maravilla disfruta de unas merecidas vacaciones.
Durante la semana pasada se le vio descansando en Italia. Pero este fin de semana, Sánchez viajó a su tierra natal, Tocopilla, lugar en donde se dio el tiempo de compartir con la gente en un cálido contexto: el goleador histórico disputó un partido en el estadio Ascanio Cortés de la ciudad nortina, instancia en la que mostró gambetas, observó una definición a penales y, al final, se dio el tiempo para fotografiarse con sus fanáticos, quienes invadieron la cancha con tal de poder tener un recuerdo.
Mientras define su futuro
El futbolista hace este viaje a Chile mientras su futuro sigue siendo una incógnita. En Francia, el Marsella trabaja arduamente en su renovación para la próxima temporada. Éric di Meco, campeón de la Champions con el club, clama por la renovación del jugador nacional: “El club apuesta en grande, es un jugador que los hinchas adoran”. Al mismo tiempo, advierte: “Sánchez está esperando ver las opciones que tiene (…) no tiene apego al equipo, no reconoce al club que relanzó su carrera”.
De momento, según informó el diario L’Equipe, el director deportivo del conjunto portuario Javier Ribalta y el representante del artillero, el argentino Fernando Felicevich, están en conversaciones. El contrato de Sánchez finalizó el 30 de junio, por lo que en estos momentos es agente libre, algo que lo hace más que atractivo para el mercado mundial.
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