El Presidente de la República Gabriel Boric visitó el Centro Acuático del Estadio Nacional para ver la actuación de Kristel Köbrich en la final de los 800 metros. La nadadora nacional remató en el cuarto lugar, con un tiempo de 8′35″69, quedando a solo segundos del bronce, que quedó en manos de la brasileña Viviane Jungblut.
El mandatario arribó a la piscina del recinto ñuñoíno media hora antes de que la abanderada chilena y cinco veces olímpica iniciara su participación. De inmediato fue reconocido por el público, que le pidió selfies y saludos. Al ser anunciado por los altoparlantes, recibió una estruendosa ovación. Se sentó en una de las tribunas donde fue acompañado por el ministro del Deporte Jaime Pizarro, la subsecretaria de esa misma cartera Antonia Illanes y el director del IND Israel Castro.
Al término de la participación de la deportista chilena, Boric permaneció unos minutos compartiendo con la gente. Incluso, hasta se colocó una máscara con la cara de la nadadora nacional, lo que desató las risas del propio mandatario y de su comitiva.
Palabras emotivas
A la salida, la guardia presidencial solicitó que los padres y madres con niños se pusieran en una mejor ubicación para poder saludarlo. Entre ellas, estaba Katherinne Köbrich, hermana de la deportista, y su hija de 12 años.
Al encontrarse con el Presidente, se produjo un emotivo diálogo, del que fue testigo El Deportivo. “Felicitaciones, mándale un abrazo gigante de mi parte, mi admiración tremenda y mi agradecimiento”, le señaló la máxima autoridad del país a la hermana de Köbrich, visiblemente emocionado por el encuentro y la figura de la máxima referente chilena de la natación.
“Que el presidente te vaya a ver nadar me parece un reconocimiento al esfuerzo. O más que esfuerzo es un reconocimiento a que es una leyenda. Me gustó lo que dijo de ella; que la admiraba”, afirma la hermana de la exponente de la natación chilena.