La fecha recién pasada del fútbol chileno quedó marcada por la grave lesión de Eugenio Mena. El lateral sufrió una fractura de tibia y peroné tras un cruce de Raimundo Rebolledo en el duelo entre la Universidad Católica y Ñublense. La lesión lo tendrá al menos por cuatro meses fuera de la cancha.
Dichos plazos fueron estipulados por Cristián Ortiz, traumatólogo del equipo de Medicina Deportiva de Clínica Universidad de los Andes, quien conversó con El Deportivo sobre la lesión del ex seleccionado nacional, los pasos a seguir y lo que podría provocar dicha lesión en la carrera de Mena.
El profesional es claro que apuntar que la lesión por si sola no significaría un riesgo de retiro para el Keno, ya que aún se considera al futbolista como un paciente sin una edad problemática para dichas fracturas. Eso sí, no descarta un retiro, principalmente por el periodo que podría estar fuera de la cancha.
“Para este tipo de lesiones aún es joven, el tema que un tiempo de recuperación así de largo para él puede significar el fin de su carrera, pero un chico de 18 años con certeza vuelve a jugar. En cuanto a las capacidades regenerativas es poca la diferencia entre un chico de 20 y él a su edad. Son jóvenes igual para este tipo de fractura”, explica Ortiz.
Pero ¿cuáles son los plazos de los que habla el profesional? “El tiempo promedio de cicatrización de la fractura es en promedio de tres a cuatro meses y medio. En términos generales ese es el tiempo que el deportista está sin entrenar de manera ful”, aclara.
Y tras esa explicación detalla cuáles serán los pasos que tendrá que ir superando el ex Racing de Avellaneda. “Va a poder empezar su recuperación kinésica a la semana, básicamente con frío, con movilizaciones progresivas, pero iniciar entrenamiento con carga comienza a la cuarta, quinta semana. Es un retorno deportivo progresivo, según como vaya mejorando la cicatrización. En ese sentido es menos que un corte de ligamento cruzado que son mínimo seis meses fuera. Igual es una lesión gravísima, pero un poco más corta y en general de buen pronóstico. Si miras la historia de los futbolistas que han tenido fractura de piernas en general vuelven a jugar al fútbol profesional” adelanta.
Cuando se le pregunta sobre posibles recaídas o si esta lesión puede traerle problemas a futuro, el médico es claro. “No quedan más propensos a sufrir lesiones porque el hueso queda igual de firme que antes. Lo que puede pasar es que haya algún daño muscular o ligamentoso y eso deje la extremidad con alguna pequeña inestabilidad, pero todos los profesionales del fútbol en nuestro país han tenido esguinces, todos han tenido desgarros y las lesiones las aprenden a compensar. No es que la persona quede normal, pero queda bien y compensa los pequeños defectos”, concluye.