Lionel Messi afronta un nuevo clásico en su carrera. Ya no se trata del Barcelona ante Real Madrid en España, ni del PSG contra el Marsella en Francia. Ahora, en Estados Unidos, jugará el Clásico del Sol con su equipo, Inter Miami, ante el Orlando City. Ambos elencos se miden en los dieciseisavos de final de la Leagues Cup, en el en el tercer compromiso de Leo con la camiseta de la escuadra de David Beckham. Y el astro argentino no falló en esta nueva cita.

Los dirigidos por Gerardo Martino, que también alineó desde el inicio a Sergio Busquets, arrancaron con todo. A los 7 minutos, la Pulga recibió un buen centro picado al área de Robert Taylor, que controló de pecho de forma magistral y definió con frialdad ante el achique del peruano Pedro Gallese para abrir la cuenta.

Amonestado en un partido caliente

Pero el Orlando City no quería ser una simple exhibición más en la que el rosarino brillara. De hecho, en la previa sus hinchas vandalizaron algunos murales del 10 en Miami. Y esa tensión se comenzó a notar dentro de la cancha.

Messi tuvo un duro cruce con Wilder Cartagena, quien le escondió el balón para no dejarlo reponer rápido el juego. Segundos después, el ex PSG le propinó una patada al mencionado Cartagena, por lo que el árbitro salvadoreño Iván Barton le mostró tarjeta amarilla a los 20′. Un duelo bastante más caliente que los dos anteriores que tuvo que disputar el argentino contra Cruz Azul y Atlanta United.

Sumado a esto, el uruguayo César Araujo marcó el empate 1-1 para darle más emoción al compromiso, gracias a un potente disparo después de varios rebotes en el área.

Messi quería más

En la segunda parte, Josef Martínez anotó de penal el 2-1. Pero la fiesta y los aplausos estaban reservados para la Pulga, que a los 72′ volvió a inscribirse en el marcador. Definió en el área de primera y de derecha para el definitivo 3-1 sobre el equipo de Florida, ante el delirio del Lockhart Stadium.

Saldo más que positivo para Messi en sus primeros compromisos en tierras estadounidenses: tres partidos, tres triunfos y cinco tantos convertidos.