Quinto (se entregan dos bronces) en Tokio 2020, Yasmani Acosta viajó a París son sed de revancha. Por edad y nivel estos son los Juegos Olímpicos en donde puede mostrar su mejor versión, por lo que la medalla, nuevamente, es el único escenario que pasa por su cabeza.
Así se lo hizo saber a La Tercera solo semanas antes de arribar en Francia: “No me siento ganador de un diploma olímpico, porque mi mentalidad no era ir por un cuarto lugar o ir a participar, yo iba por las medallas. Mi diploma no sé si está en el Comité Olímpico y no lo quiero tampoco. Yo iba por la medalla olímpica en Tokio y ahora estoy con la misma mentalidad. Es mi exigencia, mi meta y mi desafío propio”, señalaba.
El anhelo este lunes comenzaba su búsqueda para transformarse en realidad. 24 horas después de que Chile consiguiera su primer oro olímpico en estos Juegos, Acosta enfrentaba el desafío inaugural de su camino en París ante el búlgaro Kiril Milov.
La lucha fue igualada, técnica y comenzó con problemas para el chileno nacido en Cuba, ya que Milov ganó el primer punto. Un 0-1 que se mantuvo en el primer periodo (3 minutos), por lo que solo quedaban 180 segundos para igualar el combate.
Eso sucedió antes del primer minuto del segundo periodo. Acosta al empatar las acciones además también conseguía tener la ventaja en caso de igualdad, pero lo cierto es que el combate se comenzaba a complicar. Muy desgastado físicamente, el chileno resistió los ataques de Milov durante la última parte del enfrentamiento.
Entrega que fue premiada con el paso a los cuartos de final y el diploma olímpico. Eso como un hito ya asegurado, porque el chileno irá por la medalla. Para eso necesitaba vencer en su segundo combate del día.