El oro número 13 del Team Chile en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 estuvo a menos de cuatro segundos de concretarse. Fue por Tomás Freire, quien con 20 años puso en aprietos al histórico Andrés Madera, ganador de la prueba en Lima 2019. De hecho, el venezolano festejó nuevamente en la categoría -67 kilos por haber pegado primero en la definición, ya que terminaron igualados a 3 cuando el tiempo se terminó.
Situación que dejó afectado al joven chileno, quien con la plata deja en claro que será un referente continental de la disciplina en los próximos años. Eso de todas formas no fue bálsamo en la derrota. “Para esto no es lo que trabajo. Estoy en mi casa. Cometí un error y se paga caro. No puedo dejar estas cosas en la manos de los árbitros. Pido disculpas. En mi casa no puedo perder. Fue un combate muy duro”, confesó solo segundos después de que los jueces tuvieran que analizar por vídeo los últimos segundos de la final.
Con el mismo tono, siguió reflexionando: “Yo no entreno para salir segundo. Es una final, todo lo que quieran, pero yo no trabajo por segundos lugares”, reafirmó.
Segundos después y en la misma conversación con los medios agolpados en el Centro de Deportes de Contacto, Freire optó por ver el lado positivo de la situación que recién habría vivido. “La medalla de plata va para mi familia, para mi entrenador. Tengo un gran equipo detrás. A todos mis compañeros que me ayudaron. El karate chileno está en un nivel altísimo. Como equipo somos muy unidos, muy fuertes y eso nos está ayudando mucho”, expuso.
El desarrollo del combate fue digno de la instancia. Un duelo estratégico, donde la experiencia de Madera luchaba contra el ímpetu de Freire. No hubo muchos momentos de contacto, pero cuando sucedieron, el nacional puso en aprietos al multicampeón venezolano.
Madera se llevó los primeros puntos, pero cuando quedaba un minuto y cinco segundos para el cierre, Freire logró a través de la revisión de los árbitros tres puntos que lo dejaban con la gran chance del oro. Así fue hasta que quedaban 4.3 segundos para el final. Una jugada en que ambos reclamaron victoria, quedó a favor del venezolano por la revisión de los jueces, quienes estuvieron un largo rato revisando la acción. Un yuko que emparejó las acciones y que por el senshu (pegar primero) le dio el oro al karateka de 35 años.
De esta manera también se escapa la tan ansiada medalla dorada número 13, que habría permitido igualar la cosecha de primeros lugares conseguida en Lima 2019. De todas formas, si se va al medallero en general, el desempeño conseguido en Santiago 2023 es ampliamente mejor que el conseguido en la capital peruana.