“Su nombre es Boris González, canta Una lágrima y un recuerdo”, dice Don Francisco en un video de archivo de Sábados Gigantes para presentar a un desconocido Zalo Reyes. Con aquel recuerdo partió el homenaje que se realizó al recientemente fallecido cantante chileno durante la tarde de este domingo.
Tras un repaso por su carrera, su cercanía con Mario Kreutzberger y su histórico paso por el Festival de Viña de 1983, el Teatro Teletón volvió a escuchar la voz del Gorrión. Su nieto, el pianista Boris González, fue el encargado de reinterpretar Cómo quiero a mi gente, canción la canción del fallecido artista con la que quería ser recordado.
El grupo Natalino se sumó al emotivo momento para presentar una versión especial de Con una lágrima en la garganta, tema que había sido trabajado con el mismísimo cantante previo a su fallecimiento en agosto pasado a la edad de 69 años.
Una relación especial con Don Francisco
Si bien el conductor no apareció durante el homenaje, las imágenes de archivo mostraron la cercanía que tuvo con el cantante durante los años 80. Por esa época, el Gorrión fue invitado por Don Francisco para coanimar el segmento Este es mi barrio de Sábados Gigantes.
“Después de haber cantado en varios programas de la televisión, dos con mucho éxito, yo le dije: oye, por qué no te vienes y coanimas conmigo Este es mi barrio. Él siempre habló de que era un hombre del barrio donde vivía y que nunca se iba a cambiar de Conchalí. Y, de hecho, no se cambió, lo que le cambiaron es el nombre de la calle”, recordaría Mario Kreutzberger en conversación con este medio.
En la misma entrevista, el animador señalaría el compromiso de Zalo Reyes con la cruzada solidaria: “Nunca se negó, en su época activa, de participar donde le dijeran para la Teletón. Siempre participó. Fue un gran colaborador”.