A pesar de tener ya dos exitosos discos, de haber sido parte de un sencillo ineludible en el mundo como Closer (2016) de The Chainsmokers, y de ser considerada una de las estrellas pop más relevantes de la actualidad, la norteamericana Ashley Frangipane, más conocida como Halsey (23), aún mantiene algo de la inocencia de la joven que comenzó grabando canciones en su pieza y subiéndolas a redes sociales, antes de alcanzar el estrellato. Cuando habla, su voz a ratos se llena de un asombro incrédulo cada vez que cuenta cómo es su vida ahora, riéndose algo nerviosa tras cada referencia a su éxito.

Mientras otros artistas recuerdan su paso previo por países como Chile con recuerdos vagos y genéricos, la descripción que hace Halsey a La Tercera sobre su actuación en el Lollapalooza de Santiago en 2016 es vívida y efusiva. "Era aún nueva en esto, tenía sólo un álbum y era mi primera gira grande. Entonces, cuando estaba en Chile, no podía dejar de pensar que ojalá les gustara, que ojalá me entendieran por el idioma, que no me vieran sólo 20 personas. Había muchos artistas allí, no sabía si a la gente le gustaba mi música, pero terminó siendo extraordinario. Había muchísima gente, cantaron todas las letras e incluso vi a un par de chicas adelante llorando, y me empezaron a salir lágrimas a mí", cuenta riéndose.

Ahora, la cantante regresa con nuevo disco, Hopeless fountain kingdom (2017), a presentarse este martes en el Teatro Caupolicán (entradas en Ticketek).

¿Será muy distinto verla en solitario en comparación al Lollapalooza de hace dos años?

Creo que se podrán sorprender sobre lo íntimos que se vuelven mis shows. Incluso cuando tocamos en grandes arenas siempre trato que se sienta como que estoy conversando con el público. Se da una dicotomía interesante entre ese ambiente y lo grande que puede ser el show, porque tengo muchas canciones, con muchos elementos visuales. Habrá fuego, pirotecnia y cosas locas pasando en el escenario. Pero sigo siendo sólo yo contando historias y hablándole a mis fanáticos.

¿Cómo surgió la idea de que (la ex Fifth Harmony) Lauren Jauregui la acompañara en esta parte de la gira?

Con Lauren nos conocemos desde hace muchos años, es una de mis mejores amigas. Cuando estoy triste es la primera persona a la que llamo. Lo gracioso es que, cuando eres músico, si quieres tener tiempo con tus amigos, tienes que traerlos de gira contigo (se ríe). En el caso de Lauren, ella está por primera vez presentándose como una artista en solitario. Pensé que esta era una buena instancia para presentar su música y que de seguro haría a muchos de mis fanáticos felices. Y también me pone feliz, porque es mi amiga, y la pone feliz a ella, porque puede mostrar su música, entonces todos ganan (se ríe).

Su último disco debutó en el primer lugar del ránking Billboard. ¿Tenía confianza en la capacidad comercial del álbum?

La verdad no sabía qué esperar. La cosa con ser más conocida es que le gustas a más gente, pero también aparece más gente que te odia. Me sorprendí mucho cuando el disco debutó en el primer lugar de ventas, pero mentiría si dijera que fui feliz, porque hay muchas artistas mujeres tremendas que sacaron disco ese año y no tuvieron ese privilegio. Fui el primer disco femenino en liderar el ránking ese año, lo que es un buen logro personal, pero ya era mitad de año, y que yo fuera la primera mujer habla de un problema. No deberían estar siempre hombres en esos lugares.

Siempre ha abogado por los derechos LGBT y hace poco fue homenajeada por la organización GLAAD (La Alianza Gay y Lésbica contra la difamación). ¿Fue un logro importante a su corta edad?

Fue increíble. Ser considerada representante de algo siempre da miedo, porque sólo conozco mi experiencia [la cantante se declara bisexual]. No sé cómo lo ha pasado el resto, ni cómo hablar por todos los que salimos tanto con hombres como con mujeres. Pero que GLAAD me haya reconocido me hace sentir que lo estoy haciendo bien. Mi historia no es la historia de todos, pero amo GLAAD, es una organización que me ha ayudado mucho, y espero haberlos ayudado también. Muchos de mis fans son miembros de la comunidad LGBTQ, y me cuentan sus historias, muchas de ellas de sufrimiento, entonces no puedo escuchar eso y hacer como que no me importa. Quiero que se sientan seguros y espero seguir haciendo un buen trabajo al respecto.