En una época convulsionada y polarizada en lo social y político para Estados Unidos, son varios los que desde la trinchera del cine y la televisión intentan dar con el producto definitivo de la era Trump, aquella película o serie que el público necesita ver hoy por hoy. Fenómenos como ¡Huye! o The handmaid's tale parecen haber logrado sintetizar ciertos malestares y problemáticas de la Norteamérica actual con alegorías ingeniosas, y ahora es el turno de HBO con Here and now, la nueva producción de Alan Ball (Six feet under, True blood) que la cadena estrenará en todo el mundo el domingo a las 22.00 horas.

A diferencia de los ejemplos anteriores, la más reciente creación del también guionista de Belleza americana (1999) apuesta más por el realismo que por las metáforas, con una historia coral donde se cruzan los grandes temas que hoy se discuten en el primer mundo, como el racismo, la xenofobia, el sexismo y la igualdad de género. Esto, a través de los ojos de una familia multirracial y progresista de Portland, encabezada por el matrimonio de Audrey y Greg Bishop, roles a cargo de los ganadores del Oscar Holly Hunter y Tim Robbins. El clan lo completan sus cuatro hijos: Kristen (Sosie Bacon, hija de Kevin Bacon y Kyra Sedgwick), la única descendiente biológica de los Bishop, junto a sus tres hermanos adoptados: Ashley (Jerrika Hinton), de origen somalí; Duc (Raymond Lee), nacido en Vietnam y el colombiano Ramón, interpretado por el costarricense Daniel Zovatto.

"Creo que esta es una gran serie que se estrena en el momento adecuado, una historia que tiene muchas cosas que decir sobre nuestros tiempos", asegura a La Tercera éste último, al teléfono desde Estados Unidos, sobre una producción que ha sido catalogada por la prensa anglosajona como "la respuesta de HBO a This is us" -en relación al éxito televisivo que NBC estrenó hace dos años y de temática similar- y que, tal como en la mayoría de las creaciones de Ball, utiliza la provocación, el humor negro y a una familia disfuncional para reflexionar en torno a los grandes temas que polarizan a los norteamericanos.

"Para mí es motivo de orgullo ser parte de una serie que lleve este tipo de conversaciones a las casas, que no son necesariamente las conversaciones que la gente quiere tener. Creo que en todo el mundo estamos en un momento de transición y que a veces como comunidad ignoramos ciertos temas, como la igualdad de género, por lo que son las artes las que logran que se hable de esto y finalmente nos ayudan a tratar de ser mejores personas", agrega Zovatto.

El actor centroamericano de 26 años, cuyo currículum incluye apariciones en el filme Te sigue y la serie Fear the walking dead, tiene en Here and now su rol más estelar a la fecha, esta vez como un diseñador de videojuegos homosexual que asoma como el personaje clave en la trama de esta primera temporada de diez episodios. Es justamente Ramón, con las extrañas alucinaciones que comienza a padecer, el que gatilla las primeras fisuras en el hogar de los Bishop, obligando a sus padres a llevarlo al consultorio de un psiquiatra musulmán cuyos conflictos domésticos comienzan a cruzarse con el de la familia protagónica.

Cuando se conoció la trama de Here and now, más de alguien la vio como una mezcla de los proyectos anteriores de Alan Ball, tomando en cuenta que está el elemento familiar de Six feet under y Belleza americana, y lo sobrenatural de True blood. ¿Hay algo de cierto en esa visión?

Claro, porque estamos hablando de la obra de alguien, y en su caso creo que Alan ha insistido en algunos temas en sus producciones, por lo que puedes ver similitudes entre un proyecto y otro, es natural. De todas formas, cada serie tiene su propio mensaje, su propio objetivo, y en ese sentido pienso que este es un nuevo tipo de serie, con un hilo argumental centrado en los personajes y un reparto coral, con cosas que le van sucediendo a cada uno de los personajes. Y no son situaciones ligeras, sino que bastante intensas, conversaciones que no queremos tener. Esta serie instala esos temas e incluso puede llegar a incomodar al público en ciertos momentos. A ratos se siente como si estuviéramos abriendo una caja de Pandora, poniendo una serie de temas sobre la mesa para preguntarnos qué haremos al respecto.

Considerando el actual momento sociopolítico en Estados Unidos, ¿significó una responsabilidad o un desafío especial el interpretar al único personaje latino de la serie?

Es genial, un orgullo. Pero una de las cosas interesantes de este personaje, y que es tema durante toda la temporada, es que para Ramón las cosas a veces son un poco más fáciles porque no se ve como un latino, por así decirlo, en el sentido que no cumple con el estereotipo que los estadounidenses tienen de cómo se ve un latino. Por lo mismo considero importante que se hable mucho más de estos temas en la televisión, porque una serie como esta ayuda a que estos temas avancen y es importante mostrarlos en una forma real, emocional, más allá de la opinión que uno tenga a un nivel intelectual.