Jaime de Aguirre (67) lo describe como una "oportunidad". "Hoy la industria audiovisual está muy líquida y es el minuto de emprender. La producción independiente está viviendo uno de los mayores momentos de su historia si es que es bien comprendida por los canales y los medios en general. En la actual crisis de costos, de ingresos, en la crisis en general que se vive (en la TV), las productoras independientes deben cumplir un rol importante en la generación de contenidos audiovisuales. Ojalá que no se ahogue ese ímpetu inicial".
De esa manera, el productor audiovisual contextualiza su labor más reciente: luego de renunciar a su puesto de director ejecutivo de TVN el 6 de diciembre del año pasado -tras una serie de factores que incluyeron turbulencias financieras, de sintonía, y diferencias con el presidente Sebastián Piñera- De Aguirre asumió hace cerca de un mes el rol de consultor de la productora AGTV.
Encabezada por un viejo conocido, Pablo Ávila, ex gerente de producción y contenidos de la red pública, la empresa se ha consolidado como la mayor factoría externa de telenovelas de la pantalla chica y tiene en su recorrido sucesos recientes como Amanda, Verdades ocultas (ambas de Mega) o Pacto de sangre (Canal 13), junto a otros tropezones mayúsculos, como Río oscuro (también del 13). En la firma, también se ha reencontrado con otros estandartes de la industria, los realizadores Vicente Sabatini y Cristián Mason, ambos en funciones de directores de proyectos.
"Lo mío apunta a una consultoría en los ámbitos de la revisión de proyectos o de la proyección de la compañía", define el ejecutivo, cuyo salto a AGTV quedó sellado en junio, cuando se encontró con Ávila en la feria audiovisual Conecta Fiction de Pamplona. Hoy están trabajando en tres ideas para Canal 13 para suceder a Amor a la Catalán y a Río oscuro, ambas emitidas en el segmento nocturno: dos comedias de tono más distendido y un thriller.
¿Qué tan distinto es hacer una teleserie hoy en comparación a los 90, con mayores presupuestos y áreas dramáticas estables? De Aguirre responde: "Obviamente estamos pasando por un momento muy restrictivo, las cosas tienen que ser mucho más eficientes, orientadas y pragmáticas; pero el tema central, la capacidad de contar buenos cuentos, es lo que vale y debe seguir siendo la misma. Hoy quizás hay mucha más competencia. Pero una productora independiente, que logra construirse en el tiempo como algo sólido, perfectamente puede competir con la estabilidad que daban los canales en una época pasada".
El también ex director ejecutivo de CHV dice que llegó a AGTV cuando ya pasaron los coletazos de la mala sintonía y los cambios de horario de Río oscuro, lo que define como un traspié "totalmente normal". "No puedes ganar todos los partidos diez a cero. Hasta a Messi se le fue un penal", ilustra.
Pero su arribo a la productora externa también lo sitúa en otra estructura: ser parte de una entidad más pequeña en comparación a las grandes estaciones televisivas que lideró durante toda su trayectoria. "La posición de ser director ejecutivo de un canal, tener a cargo entre 800 a mil personas, obviamente es una responsabilidad distinta a estar en una productora. Relajo no es la palabra, pero sí hay menos presiones… en todo el sentido de la palabra".
Luego, con respecto a su paso por la señal estatal, profundiza: "Yo renuncié a canal 7 porque había llegado el minuto de bajarme de un proyecto que no me quería, un proyecto que yo imaginé distinto. Claro, en ese sentido fue un relajo, un alivio. En los últimos tres años en TVN ha habido tres directores ejecutivos y no ha cambiado nada. Está igual, no he visto que los cambios, o echar gente, haya generado un salto, salvo un poco de menor gasto. No conozco los planes del directorio, no hay nada que me llame la atención de TVN. Todo lo que estaba ahí se hizo cuando estaba yo o Alicia Zaldívar: el matinal de cinco horas, La jueza… ¿Cómo se mantiene si era tan criticado?".
Tras su salida de TVN, asumió como directora ejecutiva interina Alicia Zaldívar. En abril arribó de manera definitiva el puesto Francisco Guijón, quien a su vez decidió desvincular a Zaldívar. Con respecto a ello, De Aguirre asegura: "El despido de Alicia me parece una injusticia del porte de un camión. No es un misterio que quieran dejar a gente afín al directorio. La sacaron porque no era el perfil. No conozco una gerenta general con la experiencia de ella".