Este lunes una de las dos denunciantes de Harvey Weinstein entregó su testimonio en el juicio por abuso sexual contra el ex productor de Hollywood que se lleva a cabo en Nueva York (EE.UU.).
Se trata de Miriam Haley, de 42 años, quien conoció a Weinstein por trabajar en la industria del entretenimiento. En su relato contó que se conocieron en 2004 en un estreno en Londres. Pero el primer episodio de agresión se dio en el Festival de Cannes en 2006: en la pieza de un hotel Weinstein le pidió un masaje, a lo que ella se negó y confesó sentirse "extremadamente humillada".
Sin embargo no perdieron el contacto, y Weinstein le ayudó más tarde a conseguir trabajo en el programa Project Runway, que producía la compañía Weinstein Co.
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Miriam Haleyi. Foto: REUTERS/Gabriela Bhaskar.[/caption]
El otrora influyente productor de cine la habría perseguido en otras ocasiones, invitándola a hoteles y a viajes, a los que ella se negaba. Pero a mediados de 2006 le pidió reunirse en su departamento en Nueva York, encuentro que a juicio de Haley sería laboral. Fue ahí cuando Weinstein habría abusado de ella por primera vez. "Me abrazó y me manoseó", contó la denunciante. Luego fue acorralada por Weinstein. "Durante todo ese tiempo le dije que no quería nada de eso. Cada vez que intentaba levantarme, me volvía a empujar", relató entre lágrimas. "Intentaba escaparme, pero me di cuenta de que no servía para nada", dijo, por la diferencia de tamaño entre ella y él.
"Me dije que ir a la policía no era una opción para mí", explicó, ya que en ese entonces Haley, nacida en Finlandia, se encontraba sin visa para trabajar en Estados Unidos. Además, tenía temor de Weinstein, a quien describió como un hombre con "poder" y "contactos" en la industria.
Siguieron en contacto y de hecho, hubo un segundo encuentro donde Weinstein abusó nuevamente de ella. "Me sentí como un idiota. Y me sentí insensible", dijo al respecto.
El abogado defensor de Weinstein profundizó justamente en ese punto: en el contacto que la denunciante siguió teniendo con su presunto agresor. De hecho, mostró correos electrónicos donde ambos se escribían, y ella firmaba "con mucho amor". Eso refuerza la versión de Weinstein, quien se declara inocente y asegura que todos los encuentros han sido consensuados.
Sin embargo el juicio ya ha abordado esa arista. Hace algunos días se interrogó a una experta, la doctora Barbara Ziv, quien aclaró algunos "mitos" alrededor de las denuncias por violación y el actuar de las víctimas, afirmando que es común que sigan teniendo contacto con sus agresores. "El contacto puede variar desde mensajes de texto e intercambios de correo electrónico hasta continuar en una relación con ellos o desarrollar una relación, incluso si antes no existía", dijo Ziv, quien también fue consultada en el juicio por violación contra el actor Bill Cosby, hoy en prisión.
Tras los reportajes de los medios The New York Times y The New Yorker en octubre de 2017, donde numerosas mujeres contaban episodios de agresión sexual por parte de Weinstein, surgieron decenas de mujeres que revelaron situaciones similares, incluidas varias estrellas de Hollywood, impulsando lo que hoy se conoce como el famoso movimiento Me Too ("Yo también"). Sin embargo Weinstein solo pudo ser llevado a la justicia por dos casos: el de Haley y el de una mujer que lo acusa de violarla en 2013. Aun así, se espera que otras denunciantes sean llamadas a declarar, como lo hizo la semana pasada la actriz Annabella Sciorra. Incluso se espera que sea convocada una de las mujeres que presentó nuevos cargos penales contra Weinstein, esta vez en Los Angeles.
