Julián Elfenbein sigue siendo un rostro eje en la parrilla de Chilevisión. A su rol desde 2018 en Pasapalabra, a partir de este viernes 13 se suma una nueva temporada de Podemos hablar (PH), programa de conversación consolidado como una suerte de vitrina donde figuras de distintos ámbitos profundizan en sus claroscuros, en un género cada vez más en retirada en la TV local. En contraparte, PH lo ha podido sostener con buena sintonía.
Este retorno tendrá como invitados a Marcelo Ríos, Flavia Medina, Juan Carlos Valdivia, Rodrigo Wainraihgt, Francini Amaral y Solange Lackington, los que tendrán la habitual conversación del espacio, participando en nuevas secciones, como El Salón, en la que hablarán en profundidad temas personales; y El Espejo, donde habrá espacio para que realicen una confesión.
“Yo soy un puente para establecer una conversación en un punto de encuentro de diferentes historias de los seis personajes”, dice Elfenbein. “La conversación será más bien confesional y esa es un poco la idea de juntar a personalidades de distintos ámbitos”.
Con respecto al “Chino” Ríos como uno de sus primeros convidados al estudio, comenta: “Fue como cuando uno tiene a Marcelo en un programa, hay momentos en que hablamos de su vida, sus errores, su carrera y lo que significó ser el número uno del mundo. Hay un montón de personajes que tienen su opinión con respecto a distintos temas, nosotros podemos estar o no de acuerdo con cosas que dicen, pero es parte de PH; o sea, la gracia es que la gente pueda hablar y decir su punto de vista, nosotros tratamos de no establecer o censurar opiniones en distintos ámbitos, desde lo político hasta temas personales, opiniones con respecto a lo que está pasando en Chile, la religión, la sexualidad, por eso hay polémica”.
¿Cómo se abordará en el programa la situación que está atravesando Chile?
Siempre lo hemos hecho. Obviamente, nosotros llevamos muchos políticos invitados, y a partir de octubre dejaron de venir, pero espero que ahora regresen y creo que son parte de los temas que hay que conversar y que se vienen, así que estamos a la expectativa.
¿Cree que la televisión chilena cambió luego del estallido social?
Bueno, yo creo que sí y estos cambios siempre son positivos, a una televisión más sana, sin farándula, más propositiva, más hablando de los temas del país. Y de algún punto de vista, también más familiar, donde se puedan reunir todos.
¿Cómo su popularidad de los últimos años lo ha llevado a renovarse?
Siempre hay que estar en renovación con respecto a lo que estás haciendo. Yo tengo un sello en Pasapalabra, que es en la primera parte más juguetón y más en mi estilo de humor, y luego en el rosco es más serio y tiene que ver con una cosa más intelectual basado en la RAE. En el PH es distinto, hay momentos súper emotivos de los invitados, pero también muy polémicos, así que es una mezcla de cosas.