Perdona nuestros pecados tiene motivos para celebrar. Hoy, la teleserie nocturna de Mega cumple su primer año al aire convertida en el programa más visto de la televisión abierta, y en los próximos días sumará un nuevo hito para la pantalla local.

Esta martes, la ficción de época creada por el guionista Pablo Illanes exhibirá su capítulo número 208, una cifra poco habitual en el archivo de telenovelas nacionales. Pero hay más: según apuntan desde el equipo que lidera la directora María Eugenia Rencoret, serán finalmente cerca de 300 los episodios que se proyectan antes del desenlace de la historia, lo que efectivamente la coronará como la telenovela chilena más larga de la historia.

Un récord que se materializará antes de la emisión de su capítulo final, ya que Perdona nuestros pecados está a menos de 70 episodios de superar a la producción que hasta ahora conservaba la marca de la teleserie local más extensa: Lola, de Canal 13, que entre septiembre de 2007 y noviembre de 2008 acumuló 276 emisiones (ver recuadro).

Actualmente, la ficción protagonizada por Paola Volpato, Álvaro Rudolphy, Mariana Di Girolamo y Mario Horton, que comenzó sus grabaciones la primera quincena de enero de 2017, posee un rating promedio de 28,4 puntos y es lo más visto de la pantalla chica. A los pocos meses de su estreno se instaló como el fenómeno televisivo del año, llegando a marcar hasta más de 34 puntos de sintonía, lo que rápidamente hizo que su equipo realizador hablara de un alargue y de hasta una segunda y tercera temporadas. Por eso, al equipo de guionistas que también incluye a Josefina Fernández se unió Mauricio López.

Fue así que el elenco, que partió con 24 actores recreando el año 1953, pronto sumó a otros 14, entre ellos Héctor Noguera, Cristián Carvajal, Lorena Capetillo e Ignacia Baeza, quien apareció hace un par de días en la historia. Y en las próximas semanas se integrarán también María José Prieto y Roberto Farías.

Terremoto en la historia

En el caso de Farías, éste irrumpirá en la historia en el rol de Ismael Quiroga, el hermano de Armando (Rudolphy), de quien no tiene los mejores recuerdos. Por esto, llega con la idea de ajustar cuentas pendientes con el villano de la Villa Ruiseñor. Prieto, en tanto, dará vida a Lucrecia, una viuda que ocupa su atractivo para obtener lo que quiere, y que rápidamente se obsesiona con conquistar a Quiroga, lo que desatará la ira de Ángela Bulnes (Volpato). Incluso, desde la producción no descartan que se sumen nuevos personajes con el correr de los episodios.

Cuando Prieto y Farías aparezcan en la ficción, se estará viendo en pantalla la transición entre la primera y la segunda temporada. Porque si bien habrá un nuevo ciclo de Perdona nuestros pecados, la teleserie no saldrá del aire en ningún momento, y los nuevos capítulos solo seguirán apareciendo de forma continua. Aquello ocurrirá entre los últimos días de marzo, y las primeras semanas de abril, y será ahí donde el rol del Padre Reynaldo (Horton) tome aún más protagonismo. A partir de ese momento, la telenovela cambiará su estética porque estará ambientada en la década del 60, lo que se verá reflejado en el cambio de look de los personajes, los que evidentemente estarán vestidos de forma más moderna, sobre todo las mujeres que empiezan a usar pantalones.

El gran suceso del comienzo del nuevo ciclo será el terremoto que el 22 de mayo de 1960 sacudió a gran parte del sur de Chile, y que costó la vida de cerca de 2 mil personas. El sismo significará la muerte de algunos personajes y el nacimiento de nuevas historias y conflictos.