Rafael Araneda, animador: "Llegar a la TV de Estados Unidos tiene un significado súper especial"

El canal Fox -a través del programa La previa, antes de las noches del Festival de Viña en febrero- fue la última vitrina televisiva de Rafael Araneda. Todo ello sucedió un mes y medio después de su salida de Chilevisión, casa televisiva a la que perteneció por ocho años, y con la que no renovó contrato ante la falta de proyectos.

Tras ello, dedicó su vida a la radio -conduce Cuéntamelo todo en Pudahuel-, sin ningún proyecto concreto en Fox Networks Group y sin apariciones estables en la TV abierta. Ha sido un 2019 más lejos que cerca de la pantalla para Araneda. Pero en las próximas semanas, ese escenario se revertirá, ya que ayer se oficializó su arribo a la cadena Univisión, el canal hispanohablante más importante e influyente de EE.UU., y el mismo donde Don Francisco facturó toda su relevancia en Norteamérica con Sábado Gigante. Ahí, Araneda estará a cargo de Enamorándonos, junto a la modelo Ana Patricia Gámez.

Un salto que lo lleva a retomar su carrera foránea (tras su paso por TV Azteca en México), que lo tendrá mucho más tiempo fuera de Chile y que lo consolida como el rostro de su generación con una trayectoria más diversa. "Es un programa que va de lunes a viernes en horario estelar. Más que ser un programa de citas, es donde se busca el amor. La idea es terminar con una boda o una ceremonia, según el estilo de la pareja", explica al teléfono desde Miami.

¿Llegar a Univisión es retomar su internacionalización?

Más que buscando retomar, en el fondo yo tenía la intención de poder producir y de generar contenidos desde Fox. Fox tiene un cambio de estructura de propiedad, hay algunas definiciones que tienen que avanzar para darle movimiento al contrato que tengo con ellos, el que es más como productora que como rostro o animador. En ese contexto, yo estaba muy tranquilo, nunca tuve apuro, y se dio esto a raíz de lo que uno sembró en México.

¿O sea que se mantiene su relación con Fox?

Sí. Yo acá tengo avisadas las fechas del Festival de Viña y del programa. La próxima semana me tengo que reunir con Fox y está todo bien. Sé muy bien lo que puedo y no puedo hacer.

¿Tiene claridad si se instalará en Miami?

Yo tengo claridad, mis hijos y mi mujer también. Sin embargo, el que tiene que estar yendo y viniendo, en un principio, soy yo, dado las edades de mis hijas. En ese sentido, yo no quisiese cambiarles tan radicalmente la vida. Iremos evaluando cómo se va dando la vida, paso a paso. Además, tengo otros compromisos, con la radio Pudahuel y clientes.

¿Tiene algún significado especial llegar al mismo canal en el que Don Francisco hizo su carrera?

Tiene un significado súper especial desde el momento en que llego a Estados Unidos e Ivonne me va a buscar en su camioneta. Ella es una cubana muy simpática que lleva más de 30 años en este país, y me dice "hola, Rafa, yo te conozco. En esta misma camioneta que te voy a llevar transportaba a Don Francisco". Después llegué a vestuario, y estaba Blanquita, que me dice "yo quiero tanto a los chilenos, en el equipo de Don Francisco había tantos chilenos. Bienvenido". Él dejó una imagen de puro cariño y de gran recuerdo. Abre caminos, es imposible negarlo. Sería muy vanidoso de mi parte decir lo contrario.

Siempre ha sido mencionado como el sucesor de Don Francisco. ¿Cree que de alguna forma sus carreras se empiezan a parecer?

Él no tiene sucesores y eso lo he dicho siempre. Uno no se puede condicionar. Él tiene una carrera, y ha tenido un desarrollo fenomenal, y sería muy presuntuoso compararse o ponerse a la altura.

Estos son mis primeros pasos en esta industria. Yo ya había trabajado en México y en otros países, pero cada uno tiene una carrera, y la de él ha sido meteórica y gigante.

¿Ha extrañado estar en pantalla?

No, para nada. Se me nota en la cara, en el genio, me lo comentan mis amigos, mi familia. He estado feliz, contento y lo he pasado increíble en la radio. Todo en la vida sucede por algo, y yo siempre tomo las cosas de muy buena manera. Me hizo muy bien, tan bien que me permitió tener esta maravillosa posibilidad sin tener contratos y tener que empezar a negociar. Porque yo había tenido ofertas importantes de la televisión mexicana estando contratado por Chilevisión, a dos semanas de hacer el Festival de Viña. Era un imposible tomar la oportunidad. Hoy me tomó en plena independencia de mis horarios y proyectos.

¿Siente que CHV se farreó la posibilidad de seguir con usted?

Para nada. Con CHV hicimos una apuesta juntos, donde pudimos agregarle valor al Festival durante ochos años. Y siento que hicimos un gran trabajo con CHV cuando llego a un matinal que estaba entre el tercer y cuarto lugar, y terminamos en un sólido segundo lugar. Siento que CHV no me desaprovechó para nada. Hay mucha gente que me lo pregunta con insistencia, pero no lo siento así. Ambos hicimos lo que había que hacer. Yo no interpreto malamente situaciones que son de la industria.

¿Está la posibilidad de volver a los canales nacionales?

Sí, de hecho he tenido un par de propuestas, que no entraré a detallar, y las sigo evaluando.