El ex gerente general de CasaPiedra, Robert Schmitz, se reunió en julio con la alcaldesa de Vitacura, Camila Merino. Fue acompañado de Agustín Edwards Del Río y el motivo fue abordar la normativa vigente del terreno en el que se ubica El Mercurio. Esa ubicación, dice Schmitz, es "una alternativa, pero hay otras más que estamos revisando", para la reapertura de CasaPiedra. La marca hoy gestiona un centro de eventos en San Carlos de Apoquindo y se apresta a firmar una segunda alianza.
Su fallecimiento ocurre seis años después de la partida del empresario, con quien tuvo seis hijos: Agustín, Carolina, Felipe, Isabel, Cristián y Andrés.
Según cifras del Servicio de Impuestos Internos, sólo durante el año pasado por el pago de gravamen a la herencia, el fisco recaudó $118.037 millones. Los decesos de personas de alto patrimonio han contribuido a incrementar fuertemente dicho monto.
La semana pasada, Culto pudo asistir al último ensayo de la nueva gira del ex Pink Floyd, que comenzaba oficialmente ayer. Repasando sus clásicos y nuevas canciones, el músico se lanza contra Donald Trump.
"Nosotros creemos que don Agustín fue un hombre con un gran sentido patriótico que deja un saldo muy positivo", señaló el senador UDI Hernán Larraín. El diputado Boric ingresó a la Sala para manifestar su rechazo al acto y exigir una nueva ley de medios.
En Chile apenas se sabe de la existencia de Andrés, el quinto de los seis hermanos Edwards del Río. Esta es la historia del joven que nunca volvió -tuvo dos intentos fallidos y esta semana llegó a los funerales de su padre, Agustín Edwards- y que eligió ser un gringo anónimo a vivir con la carga pesada de su familia.
En Chile apenas se sabe de la existencia de Andrés, el quinto de los seis hermanos Edwards del Río. Esta es la historia del joven que nunca volvió -tuvo dos intentos fallidos y esta semana llegó a los funerales de su padre, Agustín Edwards- y que eligió ser un gringo anónimo a vivir con la carga pesada de su familia.
Un obituario puede ser la forma en que el periodismo nos recuerda nuestra pequeñez, el minúsculo lugar que ocupamos en el mundo.
Un obituario puede ser la forma en que el periodismo nos recuerda nuestra pequeñez, el minúsculo lugar que ocupamos en el mundo.
El periódico estadounidense marcó la trayectoria del fallecido dueño de El Mercurio, y en varios párrafos de su texto hizo hincapié en el rol que jugó en la época de Salvador Allende y durante el régimen militar, así como sus conexiones con la CIA.
¿Por qué fueron los Edwards quienes, en distintos momentos, representaron ese espíritu de fronda? Hay que remontarse al último tercio del siglo XIX.
Cristián Edwards del Río estuvo 145 días capturado por el Frente Patriótico Manuel Rodríguez, un episodio que permitió retratar la personalidad de su padre, Agustín Edwards, quien armó un comité de crisis a cargo de las negociaciones y pagó un rescate de US$ 1 millón.
El conglomerado de la familia Edwards era uno de los mayores del país en los años 60 y 70. Construido al alero de un banco fundado en 1867, el grupo fue perdiendo vigor y diversificación tras la crisis de los 80.
Documentos y grabaciones desclasificadas detallan el encuentro que Agustín Edwards mantuvo con Richard Helms, el director de la CIA, en septiembre de 1970. Además, la investigación de la Comisión Church, del Senado de EE.UU., señaló cuánto dinero le habría entregado esa agencia de inteligencia a El Mercurio, en pleno gobierno de Salvador Allende.
"Agustín Edwards fue ante todo un hombre que llevaba a Chile en su corazón, un empresario al que siempre le preocupó su país", dijo el presidente de la CPC, Alfredo Moreno.
