El grupo liderado por el ex Los Tres presentó un espectáculo sólido, sostenido con interpretaciones de alta calidad técnica, que ofrecen una mirada refrescante del blues y el rock.
Felipe Retamal N.
30 mar 2019 05:02 AM
El grupo liderado por el ex Los Tres presentó un espectáculo sólido, sostenido con interpretaciones de alta calidad técnica, que ofrecen una mirada refrescante del blues y el rock.
Álvaro Henríquez regresó a los grandes escenarios con su banda de siempre. A menos de un año del trasplante que le salvó la vida, el cantante demostró que aún puede jugar en grandes ligas.
"Fue un reencuentro muy amoroso", dijo Parra en entrevista.
Un resumen de la jornada en que alternaron números como Frank's white canvas, Caetano Veloso y Greta Van Fleet.
El domingo, frente a cien mil personas, la banda liderada por Álvaro Henríquez y Roberto "Titae" Lindl presentó doce canciones con énfasis en Fome, La espada & la pared y Los Tres, su primer disco publicado originalmente en 1991.
La historia musical de la banda penquista siempre ha estado acompañada del "barroco sucio", un estilo exagerado presente en gran parte de los videoclips del histórico grupo.
El histórico baterista de Los Tres llega a la ciudad penquista con un EP mezclado en Nueva York por un ganador del Grammy.
A las 21.00 horas el músico penquista subirá al escenario del Teatro Biobío con una banda de ocho integrantes, dirigida por Ismael Oddó. En la ocasión se podrá adquirir el booklet de 30 páginas que incluye letras y archivos de la infancia del cantautor.
Aunque partió como un chiste interno entre sus músicos, el apodo tomado de la canción de Los Tigres del Norte se transformó en una verdadera marca para el penquista.
El músico nunca ha ocultado que es un melómano de tomo y lomo. Por ello son constantes sus guiños a una galería de artistas que van desde los Beatles a Roberto Parra, pasando por una gran variedad de sonidos de música popular chilena y anglo.
Cuando el músico había disuelto Los Tres y Pettinellis, y su carrera bifurcó en una inesperada dirección en solitario, el llamado "Jefe de jefes" se rodeó de intérpretes sinfónicos de cuerdas e integrantes de Café Tacvba y Los Bunkers para hacer su disco más íntimo. Uno con Brian Wilson como brújula.
En apenas dos minutos, y con sonido monofónico, tanto letra como melodía transportan al lado más íntimo del músico.
El clip del sencillo se grabó en el matadero Franklin, en medio de parroquianos, piezas de carne y curiosos. Contó con la participación de allegados del penquista: el músico de Café Tacvba, Joselo Rangel, quien de casualidad se quedaba en Chile por esos días, y el actor Boris Quercia en la dirección.
El músico tocará de manera íntegra mañana en Concepción su debut solista de hace 15 años. Un álbum envuelto en heridas personales, sonidos que van de la cueca al rock y que contiene algunas de sus mejores composiciones en este nuevo siglo. "Aún se me paran los pelos cuando escucho estas canciones", comenta.
Se trata del booklet en gran formato del disco Álvaro Henríquez, volumen de 30 páginas que saldrá a la venta el mismo día del concierto en el Teatro Biobío de Concepción. Incluye las letras completas y parte del ideario del álbum, entre dibujos infantiles hechos por el líder de Los Tres y el certificado médico que utilizó para evadir el servicio militar.