El BCE estimó que el costo del dinero “se encuentran en niveles que están contribuyendo de forma significativa al proceso de desinflación en curso”.
11 abr 2024 08:49 AM
El BCE estimó que el costo del dinero “se encuentran en niveles que están contribuyendo de forma significativa al proceso de desinflación en curso”.
El año que ha terminado ha asistido a numerosas protestas sociales por todo el mundo mientras en el mundo de las altas finanzas también se adivinan turbulencias.
Christine Lagarde advirtió sobre el efecto de los costos laborales sobre la inflación, luego que la entidad elevara las tasas de interés por octava vez consecutiva.
La presidenta del BCE ha recordado que el sector bancario de la zona del euro es “resistente” porque tiene posiciones “sólidas” de capital y liquidez y es “fuerte” porque se han aplicado a todas las reformas regulatorias acordadas internacionalmente tras la crisis financiera mundial.
La expansión de la actividad del conjunto de la zona euro refleja la mejoría experimentada por Alemania y Francia, las dos mayores economías de la Unión Europea, que han regresado a territorio expansivo en el mes de febrero, después de ocho y siete meses, respectivamente.
Ante el crecimiento récord de los precios al consumidor, el BCE ya elevó los costos de endeudamiento en 250 puntos básicos y las apuestas de los mercados sugieren otras dos alzas de medio punto.
El Banco Central Europeo (BCE) anotó su cuarta subida consecutiva del precio del dinero.
La futura primera ministra italiana negocia con sus socios de la coalición conservadora para colocar especialistas en los ministerios claves. Fabio Panetta, miembro del comité ejecutivo del Banco Central Europeo, habría rechazado la oferta de Giorgia Meloni para encabezar la cartera económica.
El sistema financiero de la región también debe prepararse para la posibilidad de otra corrección en los mercados de activos a medida que continúa el conflicto en Ucrania, advirtió la entidad.
Asimismo la entidad manifestó su preocupación por la fortaleza del euro.
Sin embargo, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, comentó que todavía es muy "incierto" el impacto que el brote de coronavirus tendrá en la economía china y a nivel global.
Sin duda que una política monetaria expansiva es bienvenida para empujar la actividad. Ahora, habría que preguntarse qué tanto podría ayudar mayores bajas de tasas cuando ya tenemos lecturas negativas en la mayoría de los papeles soberanos.
El llamado de la saliente autoridad monetaria se dirige particularmente a Alemania, que por cierto representa uno de los mayores riesgos para la economía del bloque. Ayer el ente rector informó de un recorte de las tasas de depósito, de -0,4% a -0,5%, mientras que retomará la compra de deuda a partir de noviembre.
El BCE dispone de una amplia gama de medidas, pero cada una tiene costos, desde la dudosa eficacia y los importantes efectos secundarios, hasta la oposición directa de algunos de los principales responsables políticos.
Las opciones del BCE incluyen una combinación de recortes de tasas de interés, compras de activos y cambios en la orientación sobre los tipos.