Jamil Salmi fue uno de los redactores del informe de la OCDE que el movimiento estudiantil usó en 2011 como fundamento para exigir la gratuidad. En entrevista con Qué Pasa explica cómo la reforma no distinguió entre lo bueno y lo malo del sistema de educación superior chileno.
María Cecilia González
14 oct 2016 10:57 PM