La jerga vinícola no es fácil de descifrar y a mucha gente, en vez de ayudarle a entender, la termina confundiendo a la hora de escoger una botella. Dos expertas entregan una guía para apuntarle a la variedad correcta sin tener que simular un acento francés.
Olvídense por un rato del carmenere, el cabernet sauvignon y el chardonnay: es hora de probar otras muy buenas uvas que están dando vueltas por ahí. De verdad: hay para todos los gustos.
Ya sea para agrandar la cava personal o para hacer un obsequio —se acerca la Navidad—, siempre es bueno estar al día con las alternativas que ofrece el dinámico mercado nacional. Aquí hay diez botellas que garantizan el disfrute y que vale la pena tener en cuenta.
Tintos de un rojo profundo y llenos de fruta, que inundan la nariz y la boca, por mucho tiempo fueron menospreciados pero afortunadamente hoy son cada vez más fáciles de conseguir. Muy nuestros y versátiles, los siguientes son grandes ejemplares.
Olvídense por un rato del carmenere, el cabernet sauvignon y el chardonnay: es hora de probar otras muy buenas uvas que están dando vueltas por ahí. De verdad: hay para todos los gustos.
