Brasil, un país grande y generoso. Su música así lo reza, su arquitectura también. Sin límites literales o metafóricos, los paulistas CR2 Arquitectura abrieron, como se hace con un abanico, este espacio de 140 m² privilegiando la luz natural y la espontaneidad entre cada subespacio; moverse con facilidad y practicismo, sin olvidarse de la belleza de las formas.
Por Manuela Ovalle Fotos Fran Parente
2 abr 2020 01:20 PM