Manuel Amor Lillo cumplió labores en el Estadio Nacional cuando el recinto funcionó como centro de detención y tortura tras el Golpe de Estado de 1973. De acuerdo con lo establecido por la Corte de Apelaciones de Santiago y la Corte Suprema, no podía no conocer lo hechos que ahí ocurrían.
14 ago 2024 01:38 PM