Los choques se habrían producido hace 4 mil millones de años en el cinturón de Kuiper que orbita alrededor del Sol.
EFE
5 mar 2018 04:23 PM
Los choques se habrían producido hace 4 mil millones de años en el cinturón de Kuiper que orbita alrededor del Sol.
Se trata de C/2017 UI, cuerpo celeste cuya órbita es tan extraña que aún se desconoce su origen, siguiendo una trayectoria en ángulo con las órbitas de los planetas y sin orbitar alrededor del Sol.
A pesar de su cercanía con nuestro planeta, no generaría riesgo a la población según informó la NASA.
Un estudio reveló que el evento provocó un calentamiento de entre 5 y 8 grados Celsius y un retorno a la normalidad, en un período de 100.000 años. Eso contribuyó a algunas extinciones y el surgimiento de los mamíferos.
La nueva fotografía de color gris contrasta con la de algunas semanas que mostraba al objeto de un color rojizo.
Los primeros resultados de la sonda Rosetta dan cuenta que el cometa 67/P posee agua en una forma muy distinta a la Tierra.
El audio, de algunos segundos de duración permite escuchar el impacto del aparato sobre la superficie blanda del cometa, para luego llegar a la capa de hielo.
El módulo, actualmente en hibernación y con paradero desconocido, podría resucitar una vez que el cuerpo se acerque al Sol y pueda recargar sus baterías solares.
El aparato captado por la sonda Rosetta estuvo a la deriva por 30 minutos a una velocidad de 0.5 m/s. Su posición actual es desconocida.
Las fotos enviadas a la Tierra muestran una superficie rocosa, con una de las tres patas de la sonda en una esquina de la imagen. Se espera el análisis de los dos golpes de la aeronave al aterrizar.
La Agencia Espacial Europea indicó que el aparato se mantiene en contacto permanente con la Tierra, y que sus paneles solares funcionan perfectamente.
Philae estará activa hasta marzo de 2015, luego su temperatura subirá y no podrá operar. Rosetta, la sonda que lo orbita, seguirá el cometa hasta fines del próximo año.
Según la ESA, el robot Philae aún no está bien sujeto a la superficie y las señales de radio tienen algunas fluctuaciones, pero se mantiene la comunicación.
A 500 millones de kilómetros de la Tierra, y pasadas las 13 horas de Chile, el robot Philae aterrizó exitosamente sobre el cometa 67P. Se espera que durante la tarde comience a enviar los primeros datos e imágenes.
Roger-Maurice Bonnet indicó que aunque no se sabe con qué se encontrará el robot, haber cumplido el desafío técnico es "realmente asombroso".