Organizaciones de derechos humanos creen posible que los restos encontrados puedan corresponder a detenidos desaparecidos durante la última dictadura.
DPA
12 feb 2014 03:22 PM
Organizaciones de derechos humanos creen posible que los restos encontrados puedan corresponder a detenidos desaparecidos durante la última dictadura.
De esa manera lo confirmó el director regional del organismo a La Tercera, quien aseguró que la decisión se tomó tras conversaciones con la Ministra de Justicia. En tanto los funcionarios movilizados atendieron hasta las 12 horas.
El hecho ocurrió a las 09.30 horas de esta mañana.
La detonación se registró en la intersección de las calles Cármen y Santa Victoria, provocando daños materiales a un vehículo estacionado en el lugar.
Agentes intentaron con extintores apagar las llamas que se propagaron rápidamente hasta rodear la celda en la que se encontraban los detenidos, que murieron por asfixia.
El acusador es un joven de 16 años que habría sido obligado a golpear a otro estudiante.
La Brigada de Homicidios de la PDI realizó los peritajes y determinó que los restos, que corresponden a animales y personas, tienen una data de 60 años.
Los efectivos obligaron a los detenidos a desvestirse, los golpearon y los sometieron a varias prácticas como el llamado "submarino seco". El video de lo ocurrido está en manos de la justicia argentina.
El cabo segundo Luis Vera fue impactado por una bala que se escapó del arma de un compañero de servicio.
Se incautaron billetes de todos los valores, además de las maquinarias para fabricarlos.
Hanz Muñoz Barrios fue detenido en su domicilio y el arma empleada no fue encontrada.
Institución asegura que Freddy Quiñones opuso resistencia al procedimiento policial y que funcionarios actuaron guiados por "la igualdad ante la ley".
El hombre llegó al lugar custodiado por cuatro gendarmes que en un momento de descuido perdieron la pista del detenido.
Gracias a la denuncia de la comunidad y al accionar de Carabineros se logró la detención de uno de los sujetos.
Los hechos se registraron en la localidad de Glew, a 30 kilómetros de Buenos Aires.