Los días que siguieron al derrame la información que brindó la empresa a la población fue confusa o sencillamente inexistente: durante días no hubo claridad sobre la reposición del servicio, incluso el Presidente Piñera parece haber sido mal informado durante su visita a la ciudad, anunciando una solución en cuestión de horas que no fue tal. Transcurrida una semana desde el corte, aún no había suministro de agua potable en toda la comuna. El gerente de Essal, en tanto, le respondía indignado a un periodista que le pedía información precisa: "Te pido respeto, esta situación es demasiado grave. Estoy siendo transparente para que toda la comunidad tenga claro lo que está pasando. La situación supera todas las expectativas", dijo, como quien se siente ofendido ante una consulta indiscreta.