Según lo informado, en la llamada telefónica entre el Presidente de Francia y su homólogo ruso, durante este domingo, ambos coincidieron en “la necesidad de favorecer una salida diplomática a la crisis actual y hacer todo lo posible para lograrla".
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La información fue señalada por el secretario de Estado, Antony Blinken, quien detalló que se están intensificando las gestiones para evitar una invasión rusa a suelo ucraniano. "Aprovecharemos cada oportunidad y cada minuto que tengamos para ver si la diplomacia aún puede disuadir al presidente Putin", aseguró.
El anuncio de la prórroga de la colaboración entre Bielorrusia y Rusia se realiza ante la escalada de tensión en la frontera con Ucrania y en la región de Donbás, al este de ese país, con el propósito de "garantizar una respuesta adecuada frente a los preparativos militares de actores maliciosos cerca de nuestras fronteras comunes".
Ambos mandatarios ya conversaron de forma presencial el pasado 7 de febrero. Ayer, ante la escalada de la crisis, el presidente francés se entrevistó con su homólogo de Ucrania, Volodimir Zelenski, quien manifestó que “no respondería a las provocaciones” de Moscú.
Según un comunicado publicado por la Fuerza Conjunta de Operaciones de las Fuerzas Armadas ucranianas, habrían dos muertos y otros cuatro heridos por obuses lanzados desde los territorios controlados por las milicias independentistas prorrusas.
Según el ejército de Ucrania, el incidente ocurrió a consecuencia de un bombardeo de los separatistas, en la región este del país. Además, se reportaron 66 incidentes armados al menos hasta las siete de la mañana locales de este sábado.
El líder de la Iglesia Católica reflexionó sobre "los vientos amenazadores que soplan en las estepas de Europa del Este, encendiendo las mechas y los fuegos de las armas, dejando helados los corazones de los pobres y de los inocentes". "Ellos no cuentan”, lamentó.
“No vemos ninguna retirada de tropas rusas y eso contradice el mensaje en favor de los esfuerzos diplomáticos. Queda por ver si habrá un repliegue ruso, vemos que han aumentado el número de tropas y más están en camino", declaró el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
Ante el anuncio desde Moscú sobre la retirada de parte de las fuerzas rusas desplegadas cerca de la frontera, el ministro de Exterior de Ucrania, Dimitro Kuleba, afirmó que las autoridades ucranianas “no creen lo que oyen”, sino “lo que ven”. No obstante, precisó en que “si a esas declaraciones le sigue una retirada real, creeremos que es el inicio de una desescalada real”.
Ante el repunte de tensiones, el ministro de Defensa ruso, Igor Konashenkov, señaló este martes que algunas unidades desplegadas en la frontera y que participaban en ejercicios militares empezarían a regresar a sus bases.
Antony Blinken explicó que se trata de una “reubicación temporal” del personal diplomático a la ciudad de Leópolis, tras la aceleración de la "acumulación de fuerzas rusas” en la frontera del país.
El mandatario estadounidense analizó con su par ucraniano, Volodimir Zelenski, la concentración de fuerzas rusas en la frontera. Aunque acordaron mantener el canal diplomático, Biden aseguró que ante cualquier ataque de Moscú, se responderá “rápida y decisivamente”.
Desde la oficina del mandatario ucraniano, Volodimir Zelenski, detallaron que se espera charlar sobre la situación de seguridad y las gestiones diplomáticas para desescalar el conflicto con Rusia, ante una inminente invasión.
Los líderes de EE.UU. y Rusia conversaron vía telefónica por una hora, de forma “profesional y enfocada”, como aseguró un funcionario de la Casa Blanca. Sin embargo, desde la sede de gobierno señalaron que “sigue sin estar claro si Putin está dispuesto a seguir una vía diplomática”.
