Los legisladores hablaron durante una audiencia convocada ante el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes, a la que también fueron invitados los dirigentes opositores nicaragüenses Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro, excarcelados y desterrados por Ortega el pasado 9 de febrero.
Ello luego que el Papa Francisco calificara de "dictadura grosera" y "dictadura hitleriana" al régimen de Daniel Ortega en una entrevista.
Pizarro pasó toda la década del 80 exiliado en Nicaragua, donde trabajó para el gobierno sandinista. “El PC comete un gran error en no ser categórico en la denuncia de esta dictadura”, plantea.
El parlamentario valoró el ofrecimiento que hizo el gobierno del Presidente Boric y afirmó que las críticas de Jadue "no vienen al caso".
Luego de que el régimen de Ortega despojara a 94 nicaragüenses de su ciudadanía, los gobiernos de Colombia, Chile y Argentina han ofrecido nacionalidades a algunas de las personas perseguidas por Managua.
El alcalde de Recoleta recordó que "el Gobierno de Chile dijo que era inadecuado que representantes de otros países tengan palabras y opiniones sobre problemas externos", al tiempo que afirmó "no juzgar" al mandatario nicaragüense, Daniel Ortega.
El silencio de Argentina y Brasil, sumado a la breve respuesta de Colombia y México, posicionan al mandatario chileno como el único líder izquierdista en condenar a título personal a Daniel Ortega por la expatriación de 316 disidentes. Si bien analistas creen poco probable que esto enfrente al mandatario con sus pares, sí podría evidenciar la fractura en las distintas izquierdas de la región.
El infame centro de reclusión nicaragüense que alguna vez sirvió como lugar de detención para los aliados del Presidente Ortega, cuando derrocaron al régimen de Somoza, ahora funciona como cárcel para esos mismos excompañeros de armas. Fue este el lugar donde muchos de ellos pasaron sus días antes de ser expulsados y despojados de su nacionalidad, el 9 de febrero pasado.
Las historias de los reos políticos son una vitrina de su resistencia en Nicaragua, pero también de la deshumanización de sus verdugos.
Desde un delicado balance entre China y Estados Unidos hasta la llegada del cubano Miguel Díaz-Canel y el fallido viaje del mandatario venezolano, son algunos de los desafíos que el mandatario argentino deberá superar como anfitrión de la VII cumbre del bloque regional que tendrá lugar este martes en Buenos Aires.
El partido liderado por Daniel Ortega se impuso en la totalidad de los municipios que elegían nuevas autoridades, esto en medio de una oposición que fue vetada del proceso por los tribunales de dicho país.
La medida se da tras la declaración del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, que el miércoles pasado advirtió sobre la profundización de la violación a los DD. HH. en Nicaragua.
Desde hace un tiempo, el hijo de Daniel Ortega y Rosario Murillo viene trabajando para el régimen como alto funcionario diplomático, a pesar de que se supone ilegal nombrar a familiares en cargos públicos.
El encuentro se da en medio de la agenda de actividades de la ministra durante la visita del Presidente Gabriel Boric a Estados Unidos para participar de la IX Cumbre de las Américas. En el pasado, la situación en Nicaragua ha enfrentado al Mandatario con una de las colectividades ejes de su gobierno, el Partido Comunista.
La medida a discutirse hoy en el Legislativo, de mayoría oficialista, ha sido recibida con protestas por parte de intelectuales y escritores.
