Dave Mustaine se abrió la camisa y caminó solo cubriendo el escenario de extremo a extremo, recibiendo el aplauso de un público que lo ha visto numerosas veces desde la década del 90. Es una audiencia que combina huestes veteranas y jóvenes feligreses, que comulgan con el imaginario convulso de Megadeth donde la guerra, la política y los tormentos mentales, son recurrentes. Nada menos que nuestro pasado, presente y futuro.
10 abr 2024 09:20 AM