Hace seis años, con dos hijas y una intensa rutina de negocios, esta cubana residente en Chile, hizo un giro radical en su vida: se puso a correr y nunca más paró. Sus fuertes piernas ya han recorrido más de 2700 kilómetros en los cinco continentes, atravesando remotos desiertos, montañas y selvas, en condiciones extremas de sobrevivencia. "Se trata de saber estar con uno mismo y seguir adelante", afirma. Su autobiografía, Después de la distancia (Editorial Ceibo), acaba de ser lanzada por el estudio editorial Memoria Creativa.