El ascenso de Bolsonaro es la respuesta rabiosa de un amplio sector de la población brasileña -la clase alta y los sectores medios- al triste espectáculo que dio el Partido de los Trabajadores durante la última década, consumido por la corrupción desvergonzada y por la incapacidad de sus gobiernos de ofrecer algo más que explicaciones a la inseguridad imperante en las grandes ciudades.
Óscar Contardo
13 oct 2018 02:33 PM