La obra de la artista María Ezcurra (40) interroga los códigos de lenguaje que se ocultan en los objetos cotidianos. Para ello utiliza la ropa como un elemento que conecta lo privado y lo público al satisfacer la necesidad básica de cubrir el cuerpo, pero que, al mismo tiempo, es portadora de mensajes sociales. En sus instalaciones, esculturas y performances la ropa habla.
Francisca Siebold
11 sep 2013 11:36 AM