En su último acto como rey después de 39 años de reinado, Juan Carlos I sancionó la ley con la que abdica al trono en favor de su hijo Felipe.
DPA
18 jun 2014 09:05 AM
En su último acto como rey después de 39 años de reinado, Juan Carlos I sancionó la ley con la que abdica al trono en favor de su hijo Felipe.
Los reyes de España mantendrán con carácter honorífico y recibirán tratamiento de majestad y honores análogos a los establecidos para los herederos de la Corona.
El jueves 19 de junio tendrá lugar la proclamación de Felipe VI. En la ceremonia no estará presente su padre, el rey Juan Carlos I.
El rey de España arropará al príncipe Felipe en un acto previo a la proclamación, donde le impondrá el fajín de capitán general de los Ejércitos.
La ley de abdicación del monarca obtuvo en la cámara baja un respaldo de más del 80% de los diputados, pese a las voces republicanas que exigen un referéndum.
La casa real española defendió el aforamiento del rey, una vez que traspase la corona a su hijo Felipe, ya que durante su reinado ha gozado de inviolabilidad.
Su padre fue el primer monarca español que pisó América Latina y Felipe se encargó de representar a su país en las tomas de posesión de los jefes de Estado desde 1996.
El reclamo público de una Tercera República va ganando fuerza en el país, hasta el punto de que el republicanismo se ha convertido en España en una opción real.
Era lógico preguntarse: ¿vendrá otro tiempo para España?
Henar Ortiz defendió en la red social de Twitter el referéndum sobre la monarquía que pide una parte de la izquierda social y política.
Aspectos como la agenda, asignación presupuestaria, tratamiento o situación jurídica del rey abdicado se vuelven inciertos ya que no están reglados.
A juicio del historiador español y biógrafo de la reina Sofía, "no era el momento" para la dimisión del rey Juan Carlos.
El monarca español decidió abdicar afectado por los escándalos y complicado por su salud.
Miles de manifestantes se volcaron a las principales ciudades del país para exigir un referéndum que decida el futuro de la monarquía, tras el anuncio de abdicación del rey Juan Carlos.
Madrid fue el epicentro de las concentraciones que tuvieron lugar en varias ciudades, entre ellas Barcelona, bajo el lema "Monarquía no, gracias".