En primera instancia, los acreedores de la constructora que está en proceso de liquidación señalaron que la deuda ascendía a $6.000 millones. No obstante, el municipio sólo reconocía un compromiso en torno a $2.700 millones, que al descontar la multa que cursó, quedaba en $200 millones.
Mediante un oficio emitido a la Contraloría, el municipio redujo en 51% la multa por atraso de obra.
El monto reclamado apunta a la remodelación de la emblemática Villa Portales tras el terremoto de 2010.
Acreedores prefirieron a esta firma al no haber trabajado antes con la inmobiliaria.
Además, aprobaron vender firmas donde son co-socios con alguna otra constructora.
Constructoras medianas y un fondo de inversión han manifestado su interés. Empresarios socios en proyectos actuales, como Rodrigo Picó, han ofrecido comprar.
Constructoras medianas y un fondo de inversión han manifestado su interés. Empresarios socios en proyectos actuales, como Rodrigo Picó, han ofrecido comprar.
Rodrigo Picó, la familia Krauss y SalfaCorp estarían entre los principales los interesados.
Banco BCI y Euroamérica están entre los principales acreedores. Estrategia legal apuntaría a iniciar el mismo proceso con otras filiales del grupo.
Socios de inmobiliaria detectaron errores en sus balances y aunque intervinieron la administración, no lograron salvar la compañía. Además de la ex administración, controladores culpan al Serviu por impagos por viviendas sociales y obras de reconstrucción.
