A una semana de una de las celebraciones religiosas más importantes del mundo cristiano, las autoridades han debido resolver la polémica sobre el futuro de los ritos en pandemia.
25 mar 2021 08:19 PM
A una semana de una de las celebraciones religiosas más importantes del mundo cristiano, las autoridades han debido resolver la polémica sobre el futuro de los ritos en pandemia.
Se espera que el fenómeno climático toque tierra este domingo en la zona de Dinagat-Homonhon-Leyte. De momento, más de 11.000 personas han abandonado algunas localidades en el camino de la tormenta.
Políticos y trabajadores de casino se vacunan ilegalmente, mientras el resto de la población tendrá que esperar hasta febrero.
El Presidente de Filipinas ha defendido a los miembros del equipo de seguridad que se inocularon sin autorización en septiembre y octubre.
Los violentos vientos y la torrencial lluvia derribó postes de electricidad y provocó inundaciones y deslizamientos de tierra que sepultaron viviendas a medida que el "súper tifón" avanzaba hacia la parte sur de Luzón.
El Presidente Rodrigo Duterte extendió hasta el 30 de septiembre el confinamiento iniciado el 15 de marzo. La capital filipina suma el 55% de los contagios del país, que es el foco de casos en el Sudeste Asiático.
Siete soldados, un policía y seis civiles murieron en las explosiones, la primera y más potente de ellas provocada por un artefacto casero colocado en una motocicleta aparcada afuera de un supermercado.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, le recomendó a su población el utilizar gasolina para desinfectar manos y mascarillas, como medida de protección ante el Covid-19.
El miércoles un grupo de manifestantes se enfrentaron contra la policía y el Mandatario advirtió que las fuerzas de seguridad tiene la orden de "disparar a matar". Esta jornada el director general de la Policía, Archie Gamboa, aclaró que no tienen previsto seguir dichas instrucciones y aseguró que se trata de “fuerte mensaje” que no es necesario "tomar al pie de la letra".
Varios edificios gubernamentales y públicos de todo el país, así como sedes bancarias, como la del Banco Asiático de Desarrollo en Manila, la capital, han sido cerrados para su “limpieza y desinfección”.
Según últimas cifras de autoridades chinas, a la fecha se registraron sobre 45 nuevos fallecidos a raíz de la epidemia. Esto eleva el número de víctimas faltas a 304.
Los sismólogos han advertido que el cráter podría de forma inminente generar una mayor erupción, planteando un riesgo para la vida en un radio de 14 kilómetros, la "zona de peligro" que lo rodea.
La actividad en el volcán Taal y la aparición de varias fisuras nuevas en la tierra cercana apuntan probablemente a un ascenso de magma y podría llevar a más actividad eruptiva, indicó el Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología.
Los colegios de la región, algunas las oficinas gubernamentales en Manila y la Bolsa filipina permanecían cerrados por precaución.
Ya que el recinto de la boda se encontraba en altura, los organizadores decidieron no cancelar el evento, pese a que éste se encontraba a solo 10 kilómetros del volcán.