Diversos indicadores muestran que no hay señales de una mayor desaceleración del consumo de los hogares, en un contexto donde el empleo y los salarios siguen creciendo y mejora la confianza de los consumidores, señaló el GPM en su comunicado.
La instancia, compuesta por los economistas Gonzalo Sanhueza, Roberto Alvarez, Rodrigo Fuentes, Tomas Izquierdo y Guillermo Larraín, explicó que las expectativas de inflación siguen ancladas en torno a la meta de la autoridad monetaria.
"A pesar del menor dinamismo económico mundial, la economía chilena mantiene un importante crecimiento en la actividad, en torno a su crecimiento tendencial", señaló el Grupo de Política Monetaria.
El Grupo de Política Monetaria basó su sugerencia en la incertidumbre internacional y las señales de desaceleración que muestra la actividad interna.
"Considerando las perspectivas sobre la actividad económica y la inflación, el GPM recomienda por unanimidad al Banco Central elevar nuevamente su TPM, en 50 puntos base, para así dejarla en esta oportunidad en 5%, estimando que este ritmo de alza debería disminuir a partir del próximo mes", señaló el grupo.
Entre las razones para seguir aumentando los intereses, el GPM mencionó el dinamismo de la demanda agregada y el aumento en las presiones inflacionarias.
"La demanda agregada sigue creciendo en forma vigorosa y las expectativas de inflación han experimentado un alza significativa", dijo el grupo de expertos.
Aumentos en combustibles internos no aparecen como una amenaza inflacionaria de 3 a 6 meses, dijo la instancia académica. El jueves se reúne el Consejo del instituto emisor.
Por unanimidad, los expertos pidieron al instituto emisor que mantenga con fuerza las medidas extraordinarias adoptadas en la reunión de julio.
"Existe un espacio amplio para seguir administrando una política monetaria expansiva", aseguraron los expertos.
