La guerra rusa en Ucrania o la crisis en Sudán no son ni las más largas, ni las más sangrientas. Múltiples combates civiles o de guerrilla, impulsados por simple codicia o incluso debido al cambio climático, han puesto de manifiesto un alza sustancial en las guerras desde 2011.
José Ignacio Araya
5 may 2023 10:04 PM