Los docentes atacaron la sede de la Contraloría de la Secretaría de Educación en Chilpancingo, luego que ayer protagonizaran disturbios en la sede del PRI.
AFP
12 nov 2014 02:59 PM
Los docentes atacaron la sede de la Contraloría de la Secretaría de Educación en Chilpancingo, luego que ayer protagonizaran disturbios en la sede del PRI.
Los educadores, la mayoría encapuchados, están armados con palos, piedras y cócteles molotov que tiran contra los agentes antimotines.
Las evidencias presentadas por el fiscal mexicano fueron cuestionadas por los padres de los jóvenes. Es una muestra de la histórica desconfianza de familiares de víctimas en el trabajo de las autoridades mexicanas.
El izquierdista Rogelio Martínez fue elegido por el Congreso estatal luego que su antecesor dimitiera al cargo en medio de las críticas por la desaparición de 43 estudiantes.
La recompensa podría llegar hasta los 110.000 dólares a quién entregue información sobre el paradero de los jóvenes desaparecidos y otra similar por datos que permita identificar a los probables responsables.
El titular de la Comisión Nacional de Seguridad afirmó que la medida afectará a 12 municipios del estado de Guerrero y en el de Ixtapan de Sal, en el Estado de México.
El legislativo estatal dio luz verde a la separación de José Luis Abarca del cargo al considerar que incurrió en omisión al no proteger a los estudiantes.
Alrededor de 300 efectivos se sumaron a las tareas de búsqueda, incluido un equipo de buzos que rastrea los ríos y lagos de esta zona ubicada en el estado de Guerrero, en el sur de México
"Espero y deseo (que las nuevas líneas investigativas) nos permitan muy pronto dar con el paradero de los jóvenes que hoy no han aparecido", dijo el mandatario mexicano.
Unos 500 docentes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero se manifestaron frente al Parlamento local del estado de Guerrero.
El fiscal general mexicano informó además que hay un total de 34 detenidos, de los cuales 26 son policías municipales y el resto miembros de Guerreros Unidos.
A fines de septiembre pasado desaparecieron 43 estudiantes, luego que fueran baleados por la policía de la localidad de Iguala.
Compuesta por jóvenes de entre 16 y 25 años, esta organización cobró fuerza en 2011 como una escisión del cártel de los hermanos Beltrán Leyva, tras la muerte de su líder.
Parece imposible que a las afueras de Iguala en Guerrero, alguien haya apilado 28 cuerpos en seis fosas, para luego quemarlos. Pero así lo hicieron.
Hasta el momento no se han reportado víctimas fatales por el movimiento telúrico que afectó el viernes a media docena de estados.