En paralelo, ICR puso en observación la nota de Azul Azul ante las discrepancias sobre la toma de control de Michal Clark. En su opinión, opinión, "los eventos en curso generan incertidumbre respecto de las posibles sanciones regulatorias y los potenciales costos asociados al eventual incumplimiento normativo".
Por esta misma razón, el pasado 11 de octubre Humphreys rebajó en dos escalones la clasificación de riesgo de CLF, desde BBB+ a BBB-.
SMU informó que la clasificadora mejoró las perspectivas de la clasificación de riesgo local de la compañía, desde “estables” a “positivas”, luego de completar su proceso de revisión anual.
El 4 de octubre SM SAAM informó al mercado sobre la operación de venta de activos que había sido aprobada por el directorio.
Esto luego de analizar la información comunicada al mercado por parte de la compañía sobre discrepancias con el Representante de los Tenedores de Bonos (RTB) con respecto a la definición del Ebitda ajustado generado por un recambio varietal de 2022.
La clasificadora de riesgo ICR puso a la holding “En Observación”.
A través de un comunicado, la clasificadora señaló que el cambio se fundamenta en el fortalecimiento sostenido de la situación financiera de la supermercadista.
De acuerdo al informe, el rating se sustenta en “su calidad de activos, portafolio y posición de mercado, diversificación, madurez de los activos, calidad crediticia de locatarios y en la situación financiera de la compañía”.
La cadena de casinos y hoteles solicitó el procedimiento ante el fuerte impacto en sus operacionesdel estallido social y las crisis por el coronavirus.
La decisión se debe al impacto que el menor consumo generará en la situación financiera del retail.
"Lo anterior está fundamentado en el impacto que esto (los disturbios sociales) tendría en el flujo de caja de estas compañías, el que no puede ser cuantificado con exactitud", señaló la clasificadora.
