La izquierda sufre un retroceso nunca antes visto bajo reglas democráticas. La socialdemocracia resiste solo en Uruguay, y el "socialismo del siglo XXI" se atrinchera únicamente en la dictadura venezolana y en la Bolivia de Evo Morales, que acaba de agotar su instrumento más rentable, el reclamo hacia Chile.
El ascenso de Bolsonaro es la respuesta rabiosa de un amplio sector de la población brasileña -la clase alta y los sectores medios- al triste espectáculo que dio el Partido de los Trabajadores durante la última década, consumido por la corrupción desvergonzada y por la incapacidad de sus gobiernos de ofrecer algo más que explicaciones a la inseguridad imperante en las grandes ciudades.
Cuando uno cree ver claro que la región se inclina hacia la izquierda, resulta que surgen tantas variantes de esa corriente que se hace imposible determinar cuál es la dominante. Y cuando parece que la región se orienta hacia la derecha, ocurre lo mismo en ese lado del espectro o se anuncian tensiones entre la versión liberal y la versión autoritaria que hacen imposible simplificar la descripción de América Latina.
No admitir ideología de género en las escuelas y reducir la mayoría de edad penal a 16 años por enmienda constitucional, son algunas de las ideas del abanderado.
El candidato presidencial brasileño, además aseguró no ser de extrema derecha, durante su conferencia de prensa después de la primera vuelta del domingo.
El candidato favorito para ganar las elecciones en Brasil dijo además que dicho ministerio sumaría también a las carteras actuales de Planificación e Industria y Comercio.
La excandidata presidencial francesa aseguró que la razón de la victoria de Bolsonaro en las elecciones presidenciales en Brasil es por su discurso sobre seguridad y corrupción.
De acuerdo a su equipo de especialistas, el abanderado del PSL perdió 15 kilos de masa muscular lo que todavía lo mantiene "débil".
El candidato del PSL reanudó este lunes su campaña en las redes sociales tras haber quedado en una buena posición para ganar. mientras que la carta presidencial petista se reunió con Lula en la prisión de Curitiba donde discutir su estrategia política.
El aumento sugiere aprobación de los mercados a los proyectos de privatización de empresas públicas, recorte drástico del gasto público y simplificación del Estado prometidos en la campaña.
El diputado votó en una escuela de la Villa Militar, en la zona oeste de Río de Janeiro, acompañado por su hijo, Flavio Bolsonaro, que es favorito a uno de los dos escaños al Senado por Río de Janeiro en juego en las legislativas de hoy.
Ambos candidatos que compiten en los primeros lugares, según los sondeos de intensión de votos, para los comicios del domingo insistieron este viernes en sus discrepancias.
El candidato presidencial ultraderechista fue dado de alta a solo días de que se realicen las elecciones presidenciales en Brasil, que se celebrarán el 7 de octubre.
Los límites que antes creíamos firmes han sido inesperadamente cuestionados por una estulticia majadera y agresiva que se refugia en la paranoia, niega los hechos que le resultan incómodos y ve el mundo como una permanente conspiración a la que hay que enfrentarse despreciando al más pobre, al extranjero y al diferente, porque en ellos está la fuente de todas las miserias presentes, pasadas y seguramente las futuras.
Según analistas, el candidato de extrema derecha podría ganar impulso tras el incidente del jueves en Minas Gerais. La duda es cuánto durará el efecto favorable a Bolsonaro. El PSDB y el PT podrían ser los grandes perjudicados.
