Los dispositivos electrónicos retirados de las aguas de Carolina del Sur esconden detrás el desgaste diplomático entre las dos potencias mundiales. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, aseguró que los tres objetos derribados el fin de semana no serían chinos, sino que, probablemente, se trate de globos, artilugios publicitarios inofensivos o de investigación, puesto que no contaban con sistemas de propulsión propios. También descartó indicios de que pertenezcan a servicios de inteligencia de otros países.