Vendrían con el tiempo más necesarios tributos a quien fuese primero encarcelado por el rumor -tan ridículo como malintencionado- de hacer a sus estudiantes esconder armas en los estuches de los instrumentos; y al fin fusilado y arrojado a una fosa común (de la que su familia tardaría veinticinco años en reclamarlo).
Marisol García
1 sep 2023 07:12 PM