Detenido y formalizado tras el polémico evento en Espacio Broadway del 29 de diciembre, José Antonio Aravena protagonizó uno de los episodios más criticados de la pandemia en Chile, el Ministerio del Interior se querelló en su contra y se transformó en una suerte de enemigo público. “Fui un chivo expiatorio”, asegura el dueño del teatro Caupolicán, quien mientras espera el fin de la investigación hace sus descargos, anuncia acciones legales y sigue buscando fórmulas para volver a la actividad.
3 abr 2021 07:59 PM