La convención dice que si tienes un trauma o una herida, entonces anda primero al psiquiatra y solo después de eso dedícate a hacer política. Lo concreto, sin embargo, es que más allá de esa recomendación descomedida, hoy mucha gente se moviliza bastante más a partir de la forma en la que ha sido ninguneada o abusada que por las eternas disputas, por ejemplo, sobre el tamaño del Estado o el alcance de los derechos sociales en un país como el nuestro.
Héctor Soto
12 oct 2019 04:45 PM