La dirigencia del equipo rancagüino logró disuadir al delantero de su intención inicial de partir, producto del ataque que había sufrido en las afueras de su domicilio. Los celestes siguen reuniendo antecedentes para perseguir a los responsables en la justicia.
El delantero se sumó a las prácticas del equipo de Miguel Ramírez mientras se desarrolla la investigación relativa al amedrentamiento del que fue objeto el fin de semana. El club ya inició la ofensiva legal contra los responsables.
El delantero, proveniente de Defensa y Justicia, firmará por un año en los cementeros.
El atacante suma seis lesiones desde julio del año pasado, momento en que lo nominó Pizzi y llegó a River Plate.
