María Isabel Vega tiene 30 años y, tras un pasado en el mundo de la drogadicción y alcoholismo, cuatro de sus cinco hijos pasaron al cuidado del Sename. Hoy trabaja como maestra de cerámica en una construcción, está cien por ciento libre de cualquier exceso y ya tiene a sus tres niñas de vuelta. Sin embargo, aún lucha por recuperar a su único hijo.
Pablo Gándara Barros
30 ene 2017 12:30 PM