Hay algo en la materialidad de sus rostros que puede recordar a Lucian Freud o a la manera en que Francis Bacon desfiguraba sus retratos, manchas que Najmanovich ya ha convertido en una de sus marcas registradas y que acá les otorgan un aire fantasmagórico a sus personajes.
Diego Zúñiga
15 ene 2016 02:30 AM